La familia originaria de Estados Unidos que fue hallada sin vida al interior de un condominio en el complejo turístico Bahía Príncipe, en Tulum, murió debido a la asfixia por inhalación de gases tóxicos, indicó la Fiscalía de Quintana Roo.
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En un comunicado, la Fiscalía descartó hechos violentos o un suicido, esto como resultado de los estudios periciales y los resultados de las necropsias practicadas a los cuatro cuerpos.
No se registró evidencia de que “surgieran disturbios al interior de la habitación, por lo que se descarta un hecho violento derivado de un posible robo”, apuntó la Fiscalía.
“Al concluir las necropsias de ley, médicos forenses adscritos a la Fiscalía determinaron que los cuerpos tendrían aproximadamente entre 36 a 48 horas sin vida a consecuencia de inhalar gases tóxicos, sin determinar aún el tipo de sustancia”, agregó.
Personal especializado realizó la toma de muestras patológicas, histopatologías y humor vítreo, que serán enviadas para su análisis a la PGR México, instancia federal que emitirá en los próximos 10 días un resultado de los estudios.
#Comunicado Se descarta hecho violento en fallecimiento de las cuatro personas encontradas en una habitación en el municipio de Tulum. https://t.co/wryCFbJ6Kz pic.twitter.com/3dq2d6bmTU
— Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (@FGEQuintanaRoo) March 24, 2018
Los cuerpos permanecían en las instalaciones del Servicio Médico Forense en Playa del Carmen, a la espera de ser reclamados por sus familiares.
La Fiscalía indicó que se mantiene en colaboración con la Coordinación General de Servicios Periciales de la PGR, para obtener un dictamen concluyente.
Bomberos, autoridades de Protección Civil y expertos revisaron la instalación del gas del departamento, en el proceso para identificar la fuga o el tipo de gas tóxico que provocó los decesos.
Las autoridades informaron que la familia era estadounidense. El padre tenía 41 años y la madre 38: Sus hijos, un niño y una niña, tenían 12 y 6 años.
En redes sociales y en medios estadounidenses se identificó el viernes a los miembros de la familia como Kevin, Amy, Sterling y Adrianna Sharp, originarios de Creston, Iowa. Habían viajado de vacaciones a Tulum el 15 de marzo y estaba previsto que regresaran el miércoles pasado a su lugar de origen.
Al no arribar en la fecha prevista, familiares informaron sobre la desaparición ante la embajada estadounidense en México.
De acuerdo con un reporte de CNN, Kevin Sharp era propietario de una empresa de distribución de cerveza, y era piloto en carreras de autos, en Iowa.
Con información de AFP
