Aunque al hablar de la problemática de los desaparecidos, tanto el presidente Andrés Manuel López Obrador como otros funcionarios de su gobierno han dado en varias ocasiones la cifra de 26 mil cuerpos sin identificar en forenses de todo el país, la Secretaría de Gobernación (Segob) reconoce que es una estimación y que no hay una base de datos única para saber la cifra exacta.
En respuesta a solicitudes de información, la dependencia contestó a finales de marzo pasado que no posee una base de datos con esa información y personal de la Subsecretaría de Derechos Humanos confirmó a Animal Político que se trata de estimaciones.
Este martes, el subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, presentó el primer informe oficial sobre fosas clandestinas, y criticó en general el manejo que se hizo en gobiernos anteriores de la información sobre desaparecidos, ya que aseguró que se minimizaron y ocultaron los datos, o incluso se mezclaron los casos de desapariciones en las estadísticas de homicidios. Por ello, también adelantó que se va a construir un nuevo Registro Nacional de Personas Desaparecidas, porque el que hay no tiene información confiable.
Aclaró que los restos humanos recuperados en fosas clandestinas son aparte de los “26 mil cuerpos no identificados en los servicios forenses”. Pero ese dato, según lo explicado vía transparencia, no está corroborado.
“Vale la pena precisar que son estimaciones, las cuales se presentaron derivado de los trabajos que se están llevando a cabo para dar cumplimiento a la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas (LGDFPFPSNBP), y sus instrumentos jurídicos que mandata la misma”, señaló la subsecretaría en su respuesta y agregó que hace falta el trabajo conjunto y coordinado de todas las autoridades competentes involucradas en el tema para unificar una sola base de datos.
La Ley de Desaparición Forzada, publicada en 2017, mandataba a que, entre otras herramientas, se creara un Registro Nacional de Personas Fallecidas y no Identificadas, a cargo de la entonces Procuraduría General de la República (hoy Fiscalía, FGR). Sin embargo, éste es uno de los pendientes de la Ley, y durante el nuevo gobierno, Segob es quien ha llevado la batuta en el tema de desaparecidos.
En su respuesta a la solicitud de información, la Secretaría destacó como avances las acciones de registro que ha hecho la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas (CNBP), como el informe presentado el 17 de enero por su entonces titular, Roberto Cabrera.
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Sin embargo, Cabrera —que provenía de la administración anterior y que renunció para que se eligiera a una nueva comisionada en este gobierno— dijo en ese informe que la cifra actualizada oficial de cadáveres sin identificar era de 36 mil 708, según datos de Plataforma México.
Segob también señaló que los datos de la CNBP y de Plataforma México son “cifras preliminares” y que hay que tener la cautela de no pasar por alto que son datos que se concentran provenientes de sistemas o bases de datos de distintas instituciones.
También respondió que hacen falta protocolos estandarizados en todo el país ante las fallas de la información y actuar en los estados:
“Es del conocimiento general que la mayoría de las Entidades Federativas carecen de servicios forenses y de protocolos de identificación de cuerpos y restos óseos, por ello se trabajará en un Plan Nacional de Exhumaciones e Identificación Forense para así poder tener una cifra exacta y poder desagregar la cifra que tenemos de desaparecidos en el país”, detalló.
Por otra parte, la Comisión Nacional de Búsqueda, adscrita a Segob, también respondió a la solicitud de información sobre los cuerpos no identificados en el país, pero justificó que no está entre sus funciones tener esos datos porque corresponden a otra dependencia.
“El Registro Nacional de Personas Fallecidas y no Identificadas es el registro que concentra y contiene información forense procesada de la localización, recuperación, identificación y destino final de los restos de personas no identificadas y demás información relevante para su posterior identificación, integrada con la información proporcionada por las autoridades competentes, la Federación y las Entidades Federativas, se encuentra a cargo de la Procuraduría General de la República y forma parte del Banco Nacional de Datos Forenses”, explicó.
Como ya se dijo, uno de los pendientes del cumplimiento a la Ley es justamente la creación de ese Banco de Datos y el respectivo Registro de no identificados.
