La construcción del Tren Maya, uno de los principales proyectos de infraestructura del gobierno de Andrés Manuel López Obrador para el presente sexenio, tendrá una reducción presupuestal del 51% en términos reales para el próximo 202o.
De acuerdo con el proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación 2020 dado a conocer este domingo, para el próximo año la Federación contempla destinar 2 mil 500 millones de pesos al Tren Maya, proyecto que está a cargo del Fondo Nacional de Turismo (Fonatur), que depende de la Secretaría de Turismo.
Esta cifra supone una reducción de hasta 2 mil 468 millones de pesos, en comparación con los 4 mil 968 millones que se aprobaron para este proyecto de infraestructura ferroviaria en 2019.
Sobre este punto cabe precisar que, inicialmente, en el Presupuesto de Egresos de 2019 se aprobaron 5 mil 820 millones de pesos para el Tren Maya. Sin embargo, de acuerdo con el Informe del Gasto al segundo semestre de este año, publicado por la Secretaría de Hacienda en julio pasado, el presupuesto se modificó para reducirse a 4 mil 968 millones de pesos.
No obstante, a la fecha, de acuerdo con ese mismo informe de Hacienda, no se ha ejercido dinero alguno en la construcción del proyecto, que aún se encuentra en su fase inicial de estudios y de licitaciones de contratos para su ejecución.
De hecho, apenas el pasado 9 de agosto, se anunció que el consorcio SENERMEX ganó la primera licitación para desarrollar la ingeniería básica del Tren Maya por un monto de casi 299 millones de pesos.
Esta empresa se encargará de hacer diversos estudios de cartografía, topografía, geología, geotecnia, trazo geométrico, entre otros relacionados con el proyecto.
Proyecto estrella
El Tren Maya es uno de los proyectos ‘estrella’ que López Obrador presentó durante su campaña a la Presidencia, junto a otros como la construcción de la Refinería de Dos Bocas, en Paraíso, Tabasco.
De acuerdo con la información disponible hasta ahora, la obra consiste en un tren de velocidad media (160 km/h) de pasajeros, turismo y carga, con un recorrido de 1,500 kilómetros por los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, a través de 15 estaciones, entre las que están lugares turísticos como Playa del Carmen, Cancún, Chichén Itzá, Palenque, o Valladolid.
El proyecto tiene por objetivo potenciar económicamente el sur-sureste de México atrayendo la inversión privada y el turismo. Según la Secretaría de Turismo, en 10 años esperan conseguir un flujo de más de 3 millones de visitantes anuales.
Sin embargo, el proyecto también ha originado controversia. Especialmente entre las 82 comunidades indígenas por donde pasará el megaproyecto, quienes consideran que deben ser consultados e informados sobre los impactos sociales y ambientales que originará el Tren Maya.
