La Fiscalía General de la República informó sobre la captura de Miguel “M” en Cancún, Quintana Roo, expolicía judicial de Quintana Roo señalado como presunto responsable de torturar a la periodista Lydia Cacho.
“Miguel ‘M’, quien fue detenido con pleno respeto a sus derechos humanos, sin uso de violencia ni afectación a terceros, quedó interno en el Centro de Reinserción Social Cancún, Quintana Roo, a disposición de la autoridad judicial que lo requirió”, detalló la Fiscalía.
El ahora detenido, apuntó Reforma, era agente de la Policía Judicial de Quintana Roo en 2005. Ese año Lydia Cacho fue aprehendida, acusada de difamación y calumnias a partir de una denuncia del empresario Kamel Nacif ante la Procuraduría de Justicia de Puebla, luego de que la periodista revelara en un libro el caso de una red de explotación infantil y trata de personas.
El diario también señaló que de diciembre a la fecha han sido detenidas tres personas, por su presunta responsabilidad en las agresiones contra Cacho.
“Ayer @PGR_AIC detuvo en Cancún al policía que operó desde procuraduría Quintana Roo, coludido con los gobernadores de Puebla y Quintana Roo,para llevarme en detención arbitraria y torturarme.Lo protegía la fiscal de delitos contra mujeres Guadalupe Reyes Pizón”, acusó la periodista en su cuenta de Twitter, sobre la captura de Miguel “M”.
“La fiscal protegía al policía que estaba a punto de recibir un ascenso a pesar de considerarse prófugo de la justicia. Desde hace 13 años presenté los videos de mi oficina en que aparece el detenido como cómplice”, agregó.
Solicité a las autoridades y al Ejecutivo de Quintana Roo que se inicie un proceso en contra de Fiscal que protegía al prófugo. Quintana Roo no puede tener a una responsable de Delitos contra Mujeres y Trata de Personas que encubre a red de pederastas. #AquíNadieSeRinde #QRoo pic.twitter.com/vSElODKn8t
— Lydia Cacho (@lydiacachosi) October 16, 2019
El pasado 10 de enero, el Estado mexicano ofreció una disculpa pública por fallar en su responsabilidad de proteger la libertad de expresión de la periodista Lydia Cacho, quien sufrió tortura y otras represalias tras dar a conocer la investigación que está en el libro Los Demonios del Edén.
Con información de Reforma (suscripción necesaria)
