Un ataque armado contra las instalaciones de la Policía Municipal de Villagrán, Guanajuato, dejó un saldo de al menos tres policías muertos y un herido de gravedad, así como cuatro elementos secuestrados.
La agresión se registró alrededor de las 7:30 de la noche de este martes. Según las primeras versiones, civiles entraron a las instalaciones en camionetas y desde su interior dispararon con armas de grueso calibre.
Además de los tres policías muertos y uno más herido, se dice que los civiles armados privaron de su libertad a cuatro elementos.
Tras el reporte del ataque, el lugar fue resguardado por las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado y el Ejército Mexicano, cuyos elementos realizan rondines en el municipio en busca de los vehículos sospechosos, así como de los elementos secuestrados.
En tanto, agentes de la Fiscalía General del Estado recaban datos para iniciar con la investigación de los hechos.
Hasta el momento no se reportan personas detenidas y las autoridades estatales de Guanajuato no han ofrecido mayores detalles.
Villagrán es uno de los 19 municipios de Guanajuato que forman el corredor industrial del estado, por los que cruzan los ductos de Petróleos Mexicanos conectados a la Refinería Salamanca.
Los enfrentamientos armados en este municipio han incrementado debido a la lucha entre las fuerzas de seguridad y el Cártel de Santa Rosa de Lima, el cual se dedica al robo de combustible en la zona.
Aunado a esto, en los últimos meses la violencia en el estado de Guanajuato ha aumentado debido a constantes ataques ligados al crimen organizado.
En agosto, ocho personas murieron en un ataque a un billar de Irapuato. En ese mismo mes, cinco presuntos delincuentes y un miembro de la recién creada Guardia Nacional murieron en un enfrentamiento armado en la localidad de Yuriria.
Uno de los últimos ataques fue en octubre cuando cinco personas murieron como resultado de un ataque por un grupo armado en un bar de Salamanca.
Guanajuato es uno de los centros industriales más importantes de México pues concentra a grandes fabricantes mundiales de automóviles, aviones y otras manufacturas pesadas.
Estas actividades, así como la presencia de importante infraestructura energética, atraen a organizaciones criminales que, además del narcotráfico, se dedican a actividades como la extorsión, el secuestro y el robo de combustible.
Con información de Notimex y AFP.
