La inflación anual se ubicó en 3.25%, informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la cifra más baja en cinco meses y que sorprendió a los economistas, que esperaban una inflación de 3.44%.
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró un descenso de 0.05% en marzo respecto del mes inmediato anterior.
Esta disminución en el ritmo de aumentos de precios se explica principalmente por una caída en energéticos, particularmente en gasolina.
Qué mercancías bajaron o subieron de precio
En el tercer mes del año resaltaron las bajas en la inflación de la gasolina de bajo octanaje (Magna) de 7.24% y alto octanaje (Premium) de 6.30%. En contraste el precio del huevo se elevó 6.31% y del limón 32.39%, entre otros.
Por su parte, el índice de precios subyacente reportó un aumento mensual de 0.29% y anual de 3.60%; el índice de precios no subyacente retrocedió 1.06% mensual y creció 2.19% a tasa anual.
El Inegi detalló que el comportamiento mensual del índice de precios subyacente fue resultado de alzas en los precios de las mercancías de 0.35% y de los servicios de 0.23%.
Al interior del índice de precios no subyacente, los precios de los productos agropecuarios subieron 1.30%, en tanto que los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno disminuyeron 2.83% mensual.
Baja en inflación sorprende
La caída del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de marzo es una variación “sorpresiva e inédita para un mismo mes, en los 51 años que existen registros de inflación”, afirmó Jorge Gordillo, director de análisis de CIBanco.
Explicó que esta disminución se explica en gran medida por el comportamiento en el rubro de “energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno” y la baja en el precio de los energéticos.
“Con ello, la tasa anual rompe su racha alcista y retrocede desde el 3.70 por ciento a 3.25 por ciento”, destacó en un reporte el economista.
Marcos Daniel Arias Novelo, analista de Monex, expresó que “la inflación de marzo sorprendió a la baja, lo que refuerza nuestra impresión de que las menores presiones de demanda ocasionadas por el COVID-19 han sido la fuerza dominante en la dinámica de precios”.
Sin embargo, dijo que habrá que esperar que la inflación de las próximas dos quincenas valide la tendencia, pues el traspaso de la profunda depreciación del tipo de cambio o el anuncio de un acuerdo entre Rusia y Arabia Saudita para reducir la producción del petróleo, podrían invertir la situación.
“De momento, mantenemos nuestro estimado de una baja de 50 puntos base en la tasa de interés de referencia, en la decisión de política monetaria del Banco de México (Banxico) del 14 de mayo”, abundó Arias Novelo.
