Un militar mexicano mató a un ciudadano guatemalteco en un cruce fronterizo de Chiapas, en el municipio de Mazapa de Madero.
El gobierno de Guatemala condenó la muerte del hombre, a quien identificó como Elvin Mazariegos Pérez.
Reportes de la policía local habían señalado que la víctima de 30 años apuntó con un arma a los militares, sin embargo, esto no fue así.
Esta mañana, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, consideró que hubo una “reacción errónea” del militar que disparó contra el vehículo porque los uniformados en ningún momento fueron agredidos.
Explicó que los tres civiles guatemaltecos viajaban en un vehículo y al observar el punto de revisión militar en una zona fronteriza de Chiapas dieron marcha atrás, provocando la reacción de los militares.
“Uno de nuestros elementos hace algunos disparos, donde hiere a uno de los civiles que iban en ese vehículo. Eran tres personas las que iban en ese vehículo, al herido se le da la atención por parte de nuestro propio personal y desafortunadamente se pierde la vida”, dijo.
Tras los disparos, pobladores retuvieron a 15 militares en La Esperanza, en el municipio guatemalteco de Tacaná. Resultado de negociaciones con autoridades de ambos países, la noche del lunes liberaron a nueve y a los restantes seis la madrugada de este martes.
“Se llega a un acuerdo de reparación económica y como era exigencia de los pobladores, se inician las acciones judiciales contra el responsable”, explicó Sandoval.
Este hecho ocurre luego de que Victoria Esperanza Salazar, una mujer salvadoreña, muriera en Tulum, Quintana Roo, tras ser sometida por cuatro policías.
