Después que el presidente Andrés Manuel López Obrador asegurara que en su gobierno “sí quiere oposición, pero no periodismo mafioso”, el gobierno de la Ciudad de México respaldó estas declaraciones.
A través de un mensaje publicado en la cuenta oficial del gobierno capitalino, apoyó la posición del mandatario sobre el derecho a la libertad de prensa y el diálogo abierto y escribió:
“Necesitamos a opositores, es necesaria la oposición, pero no a traficantes del derecho de prensa, de la libertad de prensa o quienes trafican con la libertad de expresión, o sea, usan la libertad de expresión para negociar, ese es un periodismo mafioso”.
“Pero la crítica es importantísima, y la transparencia, que es otra regla de oro de la democracia”, prosiguió el tuit publicado a las 11:48 de la noche.
El Gobierno de la Ciudad de México suscribe la posición del presidente @lopezobrador_ referente al derecho a la libertad de prensa, el diálogo abierto, y la crítica con transparencia:
"Necesitamos a opositores, es necesaria la oposición, pero no a traficantes del derecho de
1/2— Gobierno de la Ciudad de México (@GobCDMX) July 17, 2021
Durante su conferencia de prensa del viernes 16 de julio, López Obrador declaró que en las conferencias mañaneras no se tiene la verdad absoluta, ni es irrefutable, por el contrario, explicó que la crítica y la oposición son necesarias para purificar la vida pública del país.
¿Refrenda usted con dos años y ocho meses en el gobierno su postura de que es el periodismo crítico y bien documentado y no el lambiscón el más útil para la 4T?, le preguntó uno de los reporteros.
“La democracia también es pluralidad, es discrepancia, no es pensamiento único, lo que siempre digo, es garantizar el derecho a disentir. Entonces, adelante, este es un ejercicio para eso”, sostuvo.
Con lo que no está de acuerdo, dijo, es con el periodismo que se vuelve crítico “por dinero” y de quienes “trafican con la libertad de expresión”.
Aunque el mandatario asegura que la crítica es fundamental y que no se estigmatiza a la prensa, en su sección “Quién es quién en las mentiras de la semana” se ha calificado a periodistas y medios como “sensacionalistas, hipócritas, una vergüenza, tendenciosos, entreguistas, corruptos, mercantilistas, mentirosos”.
El presidente ha recurrido a la descalificación de periodistas y la prensa nacional e internacional asegurando que pertenecen al “conservadurismo”, que se beneficiaban de los gobiernos “neoliberales” y que están en “una abierta campaña” en contra suya y de su administración.
