
Héctor Melesio Cuén Ojeda es un hombre poderoso. De voz baja y maneras cortas, suele cerrar sus conversaciones con una oferta: “Lo que se le ofrezca, lo que quiera, estamos a la orden”.
No es casual: tiene un partido y todos en Sinaloa saben que manda en la Universidad, sin importar quien sea el rector.
Pero el poder político de Cuén no se explica sin su poder económico. “Soy empresario”, repite cuando se le pregunta sobre el origen y el tamaño de su patrimonio, hoy bajo investigación. Lo mismo dice la cuenta de “X” de su hijo, Héctor Melesio Cuén Díaz: “Empresario sinaloense”.
Y aunque sus negocios no son líderes de sus respectivas industrias, parecen ser bastante rentables, pues de acuerdo a los datos a los que Noroeste tuvo acceso, desde que dejó la rectoría de la UAS, Cuén y su familia directa acumularon 70 propiedades entre 2009 y 2022. La fortuna de la familia Cuén ha crecido desde 1973 hasta amasar un patrimonio de 86 propiedades con un valor estimado de 123 millones de pesos.
Los recursos para adquirirlas salieron, según los documentos públicos consultados, de la política, los negocios y los salarios cobrados en la universidad.
En 2009 Cuén dejó de ser Rector de la Universidad. Él renunció a su pensión, pero todos sus hijos comenzaron a cobrar en ella: Héctor Melesio Jr. comenzó en junio de 2009 como Director nivel “B” con un sueldo mensual de 21 mil 900 pesos, Mónica María el 1 de septiembre de 2004 como Maestra de asignatura “B” con un sueldo de apenas mil pesos mensuales y Angélica María el 1 de febrero de 2014 como Directora “C” en Rectoría, con un sueldo de casi 30 mil pesos mensuales, de acuerdo con una solicitud de información realizada por Noroeste a la UAS. Pero todos escalaron rápido y hoy, entre los tres hijos de Cuén cobran más de 232 mil pesos mensuales en salarios de la universidad.
Héctor Melesio Cuén Díaz, el primogénito, fungió hasta mayo pasado como Director de Bienes e Inventarios de la UAS, el mismo puesto desde el que su padre escaló a la rectoría y al cual habría renunciado cuando se hizo público que era investigado por la UIPE. A solicitud expresa de Noroeste, la UAS negó informar el estatus laboral actual de los Cuén Díaz, pero según la nómina universitaria del primer trimestre de 2023, Cuén hijo seguía cobrando igual.
Incluso, en la más reciente convocatoria del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), Cuén Díaz logró el nivel 1 como “Candidato a investigador” por su trabajo en el impacto del covid en mujeres embarazadas y niños; su nombre figura a lado de investigadores de la Facultad de Medicina de la UAS, aunque su doctorado es en psicopedagogía. Por ese grado percibirá otros 8 mil mensuales.
Por otro lado, no hay evidencia de que Jesús Angélica Díaz Quiñonez, esposa de Cuén Ojeda, perciba salario alguno en la UAS, pero sí lo hacen dos de sus hermanas, Paula Liliana y Carmen Dolores, con 89 mil y 24 mil pesos mensuales, respectivamente. Paula es Directora nivel “C” en Rectoría y Carmen es Coordinadora en la Facultad de Derecho.
En la Universidad labora también Gustavo Cuén Ojeda, hermano de Héctor Melesio y delegado municipal del PAS, con un sueldo de casi 50 mil pesos mensuales. Jesús Alfredo Cuén Ojeda, otro de sus hermanos y quien fuera asesinado un día después de que Cuén perdiera las elecciones de 2012, era también director de deportes de la Universidad. Hoy, los tres hijos de éste cobran en la UAS más de 126 mil pesos mensuales entre todos.
Pero los Cuén Díaz no son la única familia que han hecho de la UAS su modus vivendi. La UAS se convirtió en cuna del nepotismo para los más leales al cuenismo, quienes ocupan las posiciones mejor pagadas y escalan mucho más rápido que el resto de los empleados universitarios. Los más suertudos son los familiares de los rectores posteriores a Cuén.
El exrector Víctor Antonio Corrales Burgueño, sucesor directo de Cuén y luego líder formal del PAS, cobra como tal 165 mil pesos mensuales; sus hermanas, Patricia Guadalupe y Leopoldina, otros 165 mil y 26 mil pesos mensuales, respectivamente.
Patricia Guadalupe Corrales es, además, esposa del también exrector Juan Eulogio Guerra Liera, que cobra 165 mil pesos mensuales, mientras que su hijo, Juan Eulogio Guerra Corrales, recibe otros 75 mil pesos mensuales como Director de la Secretaría General.

Jesús Madueña Molina, rector suspendido temporalmente, percibe un salario de 204 mil pesos mensuales, mientras que su esposa Sofía Angulo Olivas recibe otros 89 mil pesos como Directora; sus dos hijos, Luis Alberto y Jesús Alejandro, cobran en la UAS 69 mil y 29 mil pesos mensuales por sus puestos de Jefe de Departamento y Coordinador, respectivamente.
Al mismo tiempo que el padre construía su carrera política y la familia cobraba en la universidad, los Cuén crearon al menos seis empresas de diversos giros y capitales: HB Operaciones, Inmobiliaria Luis XV, Administradora Tres Ríos, Beisbox, Wenchos y Casa María.
HB Operaciones es una lavandería de la franquicia Clyn Member’s. Inmobiliaria Luis XV es una empresa con múltiples giros, que compra propiedades y que tiene su domicilio fiscal en un edificio sobre una barbería y que factura los alimentos vendidos en el restaurante Casa María, ubicado en el centro de Culiacán y donde Cuén Ojeda suele realizar sus reuniones políticas. Wenchos y Beisbox son restaurantes con cajas de bateo que operan sucursales en Culiacán y Mazatlán. Y Administradora Tres Ríos es un conjunto de locales comerciales ocupados por un laboratorio de análisis clínicos, una casa de cambio de dólares, una empresa de químicos de limpieza, una clínica de fisioterapia y algunos otros vacíos o en renta.
Además, la familia Cuén se ha diversificado, sobre todo con Belinda Portugal Domínguez, esposa de Héctor Melesio Cuén Díaz, quien es dueña de una barbería y una tienda de regalos; ella funge como representante legal de dos de las empresas familiares.
De las 70 propiedades compradas en los últimos 13 años por la familia Cuén, 52 están a nombre de esas empresas.
En el Registro Público, la historia de la familia Cuén, desde 1983 hasta 2018, es que adquirieron y acumularon a su nombre y al de HB Operaciones e Inmobiliaria Luis XV, 49 propiedades que rebasan los 64 millones de pesos de valor.
Algunas de las propiedades de los Cuén tienen su explicación en la UAS. Por ejemplo, el 10 de agosto de 2012, Jesús Angélica Díaz Quiñónez, entonces presidenta del Sistema DIF Culiacán, cerró un trato por casi medio millón de pesos por un terreno de 5 mil metros cuadrados a la salida norte de Culiacán.
Unos meses después, el 12 de noviembre, su hija Angélica María Cuén Díaz, adquirió otros 20 mil metros en la misma zona por casi 3 millones de pesos. Las compras fueron a título personal, sin la intervención de sus empresas, pero la respuesta de por qué comprar en esa zona llegó cinco años después cuando, en noviembre de 2017, el entonces Rector de la UAS, Juan Eulogio Guerra Liera (también hoy acusado ante la Fiscalía) anunció la compra de 40 hectáreas de terrenos para la construcción de una nueva Ciudad Universitaria en esa zona.
“Hay que decir que C.U. ya es insuficiente, compramos 44 hectáreas en la salida norte por ahí donde está el seminario para crear una nueva ciudad universitaria”, anunció Guerra Liera. Este proyecto se consolidó en una primera etapa cuando en mayo de 2021, en medio de la pandemia de coronavirus, el entonces Rector develó una placa en la zona donde será construido el nuevo complejo académico.
Una investigación de Noroeste arrojó también que desde 2011, Héctor Melesio hijo fundó la empresa HB Operaciones cuando apenas tenía 26 años de edad, junto con su esposa Belinda.
Desde entonces, han adquirido 15 propiedades con valor total de 13.7 millones de pesos, de las cuales 11 han sido compradas con pagos previos en cheque. Las otras cuatro propiedades han sido adquiridas con crédito hipotecario.
Pero su comportamiento, basado en sus decisiones de compra, está ligado a la UAS. Por ejemplo, el 23 de septiembre de 2014, Héctor Melesio hijo cerró una compra de 2 millones de pesos por un pedazo de terreno junto al estacionamiento de la Torre Académica de la UAS, hacia el sur. En ese lugar, la familia construyó una plaza comercial.

El Registro Público de Comercio reporta que el ex Rector participó anteriormente en actividades empresariales con la razón social Unidad Médica de Especialidades del Noroeste y Diagnóstico Nuclear de Culiacán, hasta que cedió sus acciones y las de su esposa a uno de sus socios.
Según el Registro Público, Angélica María tiene dos propiedades a su nombre, adquiridas por casi 7 millones de pesos, en Residencial La Jolla, y un predio en la salida norte de Culiacán.
Mónica María tiene otras tres propiedades: una en la zona residencial de Altata, una playa ubicada en Navolato a media hora de Culiacán, y las otras dos se ubican en la colonia Rincón Alameda.
En los últimos años, Héctor Melesio hijo y su familia han sido los que más han comprado activos fijos. Para 2011 habían adquirido ya 15 propiedades con valor de 13.7 millones de pesos.
Según información de la UIPES, además de la compra de una casa en la colonia Montebello por 13.6 millones de pesos en 2017, los últimos movimientos de Héctor Melesio hijo se realizaron a través de Administradora Tres Ríos; y fue la adquisición de ocho departamentos de entre 900 y 1.4 millones de pesos, todos en un un mismo día, lo que llamó más la atención.
Ya se había reportado antes la compra de un terreno detrás de la Torre Académica de la UAS por un valor de 4.6 millones de pesos a través de un crédito hipotecario, y una casa en el residencial La Primavera con valor de 7 millones de pesos.
Cuando es cuestionado por su control al interior de la UAS, “El Maestro” Cuén revira negándolo y argumenta que él ya no está en la Universidad y que su éxito económico es fruto del trabajo y el esfuerzo.
El pasado mes de abril, cuando se reveló que era investigado por presunto enriquecimiento inexplicable, Cuén Ojeda escribió en su cuenta de X: “De nueva cuenta mi familia es víctima de la difamación y calumnia. El tema que retoma @noroestemx y colaboradores, que no extraña sea este medio, lo hemos aclarado un sinfín de ocasiones. Mi patrimonio es esfuerzo de 44 años de carrera empresarial. Esta no es ni la primera y no será la última persecución política, nuestra lucha sigue.”
Ese mismo mes, los Cuén contrataron al Despacho Hernández Barros como sus abogados, el mismo que defendió a Rosario Robles por el caso de La Estafa Maestra. Tras el post de Cuén, el despacho comenzó, de inmediato, a facturarle a la UAS sus honorarios.

Se espera que la ceremonia del sorteo incluya la entrega de un nuevo Premio Nobel de la Paz de la FIFA, y que Trump sea el galardonado.
A solo kilómetro y medio de la Casa Blanca, el sorteo del Mundial el viernes tendrá un marcado carácter político.
La deslumbrante ceremonia tendrá lugar en el Kennedy Center, el famoso centro artístico de Washington que ahora es presidido por el mandatario estadounidense, Donald Trump, tras la renovación de su junta directiva este año.
Junto a estrellas del fútbol, el deporte estadounidense y el mundo del espectáculo, Trump estará presente, al igual que los líderes de los otros dos países anfitriones: la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y el primer ministro de Canadá, Mark Carney.
Sin embargo, el proceso parece haber sido planeado teniendo al mandatario estadounidense muy presente.
El grupo de los años setenta Village People fue contratado para tocar YMCA, una de las canciones favoritas de Trump que se escucha con frecuencia en sus mítines de campaña.
Además, rompiendo con la tradición, la ceremonia del sorteo incluirá la entrega de un nuevo Premio Nobel de la Paz de la FIFA, y se espera que Trump sea el galardonado.
Estos gestos no harán más que subrayar la alianza forjada entre Trump y el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, quien anunció el reconocimiento el mes pasado tras afirmar que Trump merecía ganar el Premio Nobel de la Paz por su contribución al alto el fuego entre Israel y Gaza, y elogiar con entusiasmo sus políticas.
Para los críticos, estas medidas amenazan el compromiso de la FIFA con la neutralidad política, consagrado en sus estatutos, e imponen el riesgo de que el sorteo, y el propio torneo, se conviertan en herramientas de propaganda.
Los detractores consideran que Infantino y Trump tienen una relación demasiado estrecha, lo cual envía el mensaje de que el organismo rector del fútbol mundial se está alineando con el movimiento Make America Great Again (MAGA), y que respalda lo que muchos ven como una administración que fomenta la división.
Se preguntan si es sensato que la FIFA se asocie tan estrechamente con un hombre que esta misma semana hizo comentarios despectivos sobre los migrantes somalíes, describiéndolos como “basura”.
Al ser consultado sobre el premio, en medio de informes que indican que el Consejo de la FIFA no tenía conocimiento al respecto, un alto funcionario del organismo rector declaró a BBC Sport: “¿Por qué no puede ser más importante que el Premio Nobel de la Paz? El fútbol cuenta con un enorme apoyo mundial, por lo que es justo que reconozca los esfuerzos extraordinarios por lograr la paz cada año”.
Señaló que en 2019 no hubo tanta controversia cuando la FIFA otorgó al presidente de Argentina un premio en honor a su contribución al fútbol, y afirmó que la organización merece elogios por defender la paz en un mundo dividido.
El presidente Bill Clinton decidió no asistir al sorteo del Mundial de 1994, cuando Estados Unidos fue la última sede del evento. Pero no sorprende que Trump haya optado por desempeñar un papel destacado, dada la plataforma global que le ofrece el Mundial.
Como indicio de las escenas que podrían aguardar en el evento del próximo año, Trump apareció en la final del Mundial de Clubes este año, donde optó por permanecer en el podio mientras el Chelsea celebraba la victoria, disfrutando claramente de ser el centro de atención tras entregarles el trofeo.
Más recientemente, saludó a Cristiano Ronaldo en una cena en la Casa Blanca en honor al príncipe heredero saudí. Apenas unos días después, la FIFA le concedió un indulto sorpresa al delantero, luego de eliminar una sanción en su contra en dos de tres partidos, tras ser expulsado por propinarle un codazo a Dara O’Shea en la derrota ante la República de Irlanda, lo que le aseguró su disponibilidad para los primeros partidos de Portugal en el Mundial.
También está la regularidad con la que Trump e Infantino han aparecido juntos en los últimos años, incluso en eventos fuera del ámbito deportivo.
Desde su primera visita al Despacho Oval en 2018, durante el primer mandato de Trump, Infantino ha sido visto con el presidente en el Foro Económico de Davos, en la firma en Washington de los Acuerdos de Abraham (un pacto entre Israel y algunos países árabes del Medio Oriente en 2020), e incluso como invitado en la segunda investidura de Trump en enero.
La FIFA celebró formalmente la estrecha amistad entre ambos tras ese evento, y el propio Infantino insistió en que era lógico, dada la importancia de que Estados Unidos acogiera tanto la Copa del Mundial de Clubes ampliada como el Mundial.
La FIFA también afirmó que Infantino tenía el deber de desarrollar y promover el fútbol a nivel mundial, y que también mantenía reuniones periódicas con otros líderes mundiales.
Si bien Infantino parecía tener una relación menos estrecha con el expresidente Joe Biden durante su etapa en la Casa Blanca, sí la ha mantenido con otros jefes de estado.
Desde que reemplazó a su predecesor Sepp Blatter hace casi una década, después de prometer que restauraría la reputación y las finanzas de la FIFA tras un enorme escándalo de corrupción, Infantino ha aparecido cerca del presidente ruso Vladimir Putin, quien le otorgó una medalla de la Orden de la Amistad de Rusia en 2019, junto con los gobernantes de otros dos anfitriones de la Copa del Mundo en Qatar y Arabia Saudita.
La proximidad de Infantino con estos líderes inevitablemente genera controversia y críticas, pero es su relación con Trump la que ha provocado la mayor reacción negativa en el fútbol.
A principios de este año, los delegados de la UEFA, el organismo rector del fútbol europeo, abandonaron el Congreso de la FIFA en Paraguay cuando Infantino llegó horas tarde tras unirse a Trump en una gira por el Medio Oriente, acusándolo de priorizar “intereses políticos privados”, lo cual “no le hace ningún favor al fútbol”.
En 2018, el propio Infantino declaró: “Está muy claro que la política debe mantenerse al margen del fútbol y el fútbol debe mantenerse al margen de la política”.
Sin embargo, defendió el viaje con Trump, insistiendo en que había sido crucial, ya que le permitió “representar al fútbol” en “importantes debates” con “líderes mundiales de la política y la economía”.
Pero el episodio solo intensificó el escrutinio sobre la relación, al igual que la decisión de la FIFA de establecer una nueva oficina en la Torre Trump de Nueva York. Infantino también apareció por sorpresa en una cumbre en Egipto en octubre, donde Trump y otros líderes mundiales firmaron una declaración para instaurar la paz en Gaza.
Infantino, el único líder deportivo presente, afirmó que el fútbol podría contribuir a los esfuerzos de paz y afirmó que la FIFA ayudaría a reconstruir las instalaciones en Gaza, pero su presencia volvió a generar controversia.
Entre tanta diplomacia futbolística, hay preocupación por el impacto que algunas políticas y declaraciones de Trump podrían tener en el Mundial. También existe incertidumbre sobre la acogida que recibirán en EE.UU. los visitantes de algunos países.
En junio, la Casa Blanca impuso a 19 países, principalmente de África, Medio Oriente y el Caribe, restricciones migratorias totales o parciales, haciendo referencia a la necesidad de gestionar las amenazas de seguridad.
En medio de sugerencias de que la lista pueda ampliarse a 30 países, tras la identificación de un hombre afgano como sospechoso del reciente tiroteo de dos soldados de la Guardia Nacional cerca de la Casa Blanca, la FIFA se comprometió a organizar un torneo acogedor y unificador.
Sin embargo, Irán y Haití, cuyos equipos clasificaron para el Mundial, se encuentran entre los países afectados por la prohibición. La semana pasada, Irán anunció que planeaba boicotear el sorteo debido al número limitado de visas para su delegación.
La orden ejecutiva de junio exime de las restricciones de viaje a los atletas y al cuerpo técnico de las selecciones que participarán en el Mundial, pero los aficionados podrían verse afectados.
“Queremos asegurarnos de ser lo más acogedores posible”, declaró el miércoles Andrew Giuliani, director ejecutivo del Grupo de Trabajo de la Copa Mundial de la Casa Blanca.
Giuliani elogió un programa diseñado para acortar los tiempos de espera para las entrevistas de visas de visitante para quienes tengan boletos, pero no descartó las redadas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), dirigidas contra migrantes indocumentados en las sedes de la Copa Mundial.
El vocero insistió en que las autoridades querían garantizar que los visitantes ingresaran legalmente a Estados Unidos, para priorizar la seguridad de los estadounidenses.
Esta posición preocupa a los defensores de las libertades civiles.
Human Rights Watch (HRW) afirma que el sorteo se llevará a cabo en “un contexto de detenciones violentas de inmigrantes, despliegues de la Guardia Nacional en ciudades estadounidenses y la servil cancelación de las campañas antirracistas y antidiscriminatorias de la propia FIFA”.
HRW forma parte de un grupo de organizaciones que el miércoles afirmó que la Copa Mundial corría un creciente peligro de ser utilizada como arma para fines autoritarios.
“Todavía hay tiempo para cumplir las promesas de la FIFA de una Copa Mundial libre de abusos contra los derechos humanos, pero el tiempo avanza”, afirmó HRW.
Tras elogiar a Infantino como “uno de los grandes hombres del deporte” durante una reunión en el Despacho Oval el mes pasado, Trump sugirió que incluso podría retirar partidos de las ciudades anfitrionas gobernadas por los demócratas si le preocupaba la seguridad.
Aunque no está claro si el presidente tomará, o si puede tomar, una medida que causaría importantes trastornos logísticos y legales, sus palabras aumentaron la incertidumbre sobre el torneo.
En la misma reunión, Trump sugirió que podría lanzar “ataques” contra México si con ello se detenía el tráfico de drogas a Estados Unidos.
Tras las fricciones que ya generaron las políticas comerciales de Trump con México y Canadá, esto no hizo más que reforzar las preocupaciones sobre el nivel de cooperación entre los tres anfitriones del Mundial en cuestiones como la seguridad del torneo.
Infantino podría afirmar que, dada la imprevisibilidad de algunas declaraciones de Trump, mantener una relación estrecha con él es aún más crucial.
Pero otros argumentarían que también corre el riesgo de obstaculizar su capacidad para confrontar al presidente de Estados Unidos.
Para Trump, el Mundial ha sido un tema central de su segunda presidencia. Le brinda la oportunidad ideal para proyectar su imagen a nivel mundial, junto con las celebraciones del 250 aniversario de la independencia de Estados Unidos el próximo año.
Al elogiar el evento como una “oportunidad económica increíblemente significativa” para Estados Unidos, Trump también espera que suponga un impulso bienvenido para el turismo, luego de un año de baja actividad para el sector en el país.
La FIFA afirma que generará cerca de US$30.000 millones para la economía y creará casi 200.000 empleos. El torneo también es una oportunidad para que el país demuestre que puede organizar un megaevento exitoso, antes de que Los Ángeles albergue los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2028.
Para Infantino, el evento deportivo más lucrativo jamás organizado también es una fuente de ingresos muy útil. Esto le permite cumplir su compromiso de impulsar el fútbol en Estados Unidos, alimentar los ingresos comerciales de la FIFA y aumentar los pagos a las federaciones nacionales de fútbol, sin perjudicar sus posibilidades de una tercera reelección como presidente en 2027.
Un mercado desregulado en Estados Unidos le permite a la FIFA gestionar una plataforma oficial de reventa de entradas para la competencia que le reportará una comisión sin precedentes del 30% en cada transacción.
Los representantes de la afición condenan la medida, al alegar que corren el riesgo de ser explotados por un modelo de precios que no refleja el espíritu del Mundial. Sin embargo, esto también ayuda a explicar por qué la FIFA espera recaudar la cifra récord de más de US$13.000 millones en su ciclo 2023-2026.
La verdadera fortaleza de la relación entre Trump e Infantino podría verse puesta a prueba en los próximos meses. Sin embargo, ambos consideran claramente que su alianza es mutuamente beneficiosa.
Haz clic aquí para leer más historias de BBC News Mundo.
Suscríbete aquí a nuestro nuevo newsletter para recibir cada viernes una selección de nuestro mejor contenido de la semana.
También puedes seguirnos en YouTube, Instagram, TikTok, X, Facebook y en nuestro nuevo canal de WhatsApp.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.