
El Senado rechazó darle licencia para separarse del cargo durante 90 días con goce de sueldo al juez de control Héctor Roberto Capetillo Lizama, quien argumentó la necesidad de atender a su hija recién nacida que tiene problemas de salud.
La decisión, basada en la reforma del Poder Judicial causó la división dentro de la propia coalición encabezada por Morena.
La solicitud del juez se basó en un acuerdo establecido por el desaparecido Consejo de la Judicatura Federal, que ya contemplaba estas licencias de paternidad, pero que fue suprimido con la reforma judicial realizada en 2024.
El rechazo a la licencia, promovido por la coalición encabezada por Morena, enfatizó que más allá del derecho a la licencia del juzgador, al Senado no le corresponde dar licencias mayores a un mes con goce de sueldo. Los legisladores del oficialismo pidieron apegarse a las reglas establecidas con la reforma judicial.

María del Rocío Corona Nakamura, del PVEM, dijo que coincidía con el planteamiento del juez pero que en la Constitución está claro que no pueden llevarlo a cabo.
“Hay una Carta Magna que nos impide poderla aprobar”, dijo la senadora.
Invitó a respetar la Constitución y a modificar las leyes para materializar que la licencia de paternidad sea similar a la de maternidad, ya que sería una vía para impulsar la igualdad entre hombres y mujeres para que puedan hacerse cargo ambos géneros de los cuidados.
Javier Corral, presidente de la Comisión de Justicia, acusó que existe un falso debate, ya que la discusión no debería ser si el juez tiene o no derecho a una licencia de paternidad. Aseguró que el juez formuló mal su solicitud, ya que no es competencia del Senado.
Pidió a la Mesa Directiva leer el artículo 98 de la Constitución en el que se señala que el Senado sólo puede conceder licencia por más de un mes sin goce de sueldo.
“El juzgador puede tener todas las causas y motivos que justifican su solicitud de licencia, hemos encontrado eco, solidaridad en las razones humanitarias y un padre que quiere atender a un hijo que por cierto ha tenido un nacimiento prematuro, eso no está discusión, eso es simple y sencillamente tratar de confundir a la opinión pública”, dijo Corral.

El tema provocó división dentro de la misma bancada de Morena. La legisladora Martha Lucía Mícher Camarena, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, criticó por qué el Senado respeta la ley en algunas ocasiones y en otras no, como la falta de paridad de género en los integrantes para la próxima Comisión Permanente del Congreso.
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“Ahora sí a cumplir con la Constitución. Ahora sí a cumplir con la ley, entonces cuando nos conviene y cuando no nos conviene sí se aplica la ley. La ley no siempre es justa…”
La legisladora se disculpó con las personas integrantes del Poder Judicial, ya que con la reforma se derogó el acuerdo para las licencias por paternidad. Aseguró que presentarán una nueva licencia para volverla a establecer.
“Podíamos haber sentado un precedente de dar esta licencia, independientemente de la reforma de la Ley Federal del Trabajo era un acto de humanidad, era un acto de progresividad de derechos”.
Micher Camarena se abstuvo de respaldar el dictamen de rechazo a la licencia del juez. La senadora Guadalupe Chavira, también de Morena, pidió que el dictamen fuera devuelto a comisiones para permitirles tener más información, pero el asunto ya estaba discutido.
El rechazo a la licencia fue aprobado por 51 votos a favor, 35 en contra y 12 abstenciones, todas de legisladores morenistas.

Alejandra Barrales, de Movimiento Ciudadano, defendió el acuerdo que existía en el Consejo Federal de la Judicatura, que daba este tipo de licencias como una prestación.
Aludió al principio pro persona que permite que la interpretación de una norma debe ser a favor de las personas y la progresividad de los derechos, que implica que estos se deben de incrementar.
“Es muy importante que no se plantee que la ley es la ley y la norma es la norma sin poner por delante este tipo de planteamientos”.
Pidió reconsiderar para avanzar en la igualdad y derechos de las mujeres, sobre los cuidados.
Laura Esquivel, del PAN, calificó como “vergonzoso, lamentable y miserable” que el Senado esté discutiendo si un papá tiene derecho a una licencia de paternidad.
“Ustedes se dicen feministas, pero perpetúan a más no poder los roles de género. Las licencias de paternidad con goce de sueldo son una deuda, sí, para los papás; sí para las mamás, pero sobre todo para los niños que tienen derecho de ser cuidados, protegidos, acompañados por mamá y papá”.
La priista Carolina Viggiano calificó el debate como demagógico. Reiteró que la reforma judicial fue “mala” y acusó que el juez evidenció su desconocimiento y mala preparación al realizar una solicitud improcedente.
“Estos son los frutos amargos de una reforma judicial. Juzgadores sin trayectoria sólida, procesos de selección que no garantizan mérito, falta de capacitación real, incertidumbre institucional. Y ahora la vergüenza de un Senado discutiendo permisos personales porque así lo decidió el capricho legislativo del oficialismo. Cuántas lagunas. Porque dijeron ‘vamos a derogar toda la Constitución’ y se les pasó este detalle. Caray”.
Viggiano rechazó votar a favor del dictamen porque, dijo, tanto argumentos como el origen son “malos”.