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Llega ‘Pancho Villa’, la serie que muestra otro lado del líder revolucionario
Llega ‘Pancho Villa’, la serie que muestra otro lado del líder revolucionario
Foto: Jorge A. Jiménez interpreta a Doroteo Arango en la serie Pancho Villa. Foto: Star+
4 minutos de lectura

Llega ‘Pancho Villa’, la serie que muestra otro lado del líder revolucionario

Platicamos con Jorge A. Jiménez, protagonista de la serie Pancho Villa, sobre la versión que nos muestra del revolucionario en esta producción de Star+.
19 de julio, 2023
Por: Abigail Camarillo
@aabi_cm 

Aprendiste de él desde la primaria como una de las figuras base de la Revolución Mexicana. Ahora, podrás conocer un lado diferente de él con la serie Pancho Villa: El Centauro del Norte que se estrena en Star+.

Ojo, no es como tal una bioserie pues la descripción de esta ha sido “producción de ficción” que se inspira en personajes y hechos reales.

¿De qué trata Pancho Villa: El Centauro del Norte?

La serie a su manera la vida del líder revolucionario Doroteo Arango, mejor conocido como Pancho Villa.

Verás desde sus inicios como un bandido durante su adolescencia, cómo se convirtió en una fuerza decisiva de la Revolución Mexicana y hasta cómo murió trágicamente en una emboscada.

La serie Pancho Villa estrena el 19 de julio con todos sus episodios.

Metiéndose en la piel de Doroteo Arango: Platicamos con Jorge A. Jiménez

Para el actor mexicano no es nuevo interpretar a una destacada figura de la historia de México. Anteriormente ya dio vida a Luis Donaldo Colosio, el candidato a la Presidencia de México asesinado en 1994, para la serie original de Netflix Historia de un Crimen: Colosio (2019).

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“En ese caso había entrevistas en video, era nada más de ponerle atención y llevar una guía”, platica en entrevista con Animal MX.

Y es que aunque Francisco Villa y Colosio son figuras conocidas por prácticamente todos los mexicanos, su preparación fue muy distinta para cada uno.

Como mencionó, con Luis Donaldo Colosio tenía la ventaja del material de archivo, de donde analizó sus movimientos, la tonalidad de su voz, las pausas que tomaba al hablar.

En el caso de Pancho Villa no existía eso; solo tenía fotografías y descripciones que otras personas hicieron del célebre revolucionario.

Nos platica que al prepararse para la serie, hizo su propia colección de fotos de Pancho Villa y empezó a identificar los momentos y situaciones. “Tuve que tratar de imaginar qué estaba pasando, si se veía molesto, relajado, listo para la batalla”, explica.

La serie Pancho Villa presenta distintos matices del revolucionario

Entre todas las fotos que encontró, Jorge A. Jiménez platica que hay una en particular que le llamó la atención: “Está totalmente derrotado, físicamente desecho. Es la única foto que encontré así, porque siempre lo ves como fuerte”.

Desde la primaria se nos presenta a Pancho Villa, cuyo nombre real era José Doroteo Arango Arámbula, como un hombre bigotón, valiente y como un “héroe” al ser de los principales líderes de la Revolución.

Sin embargo, desde adolescente se involucró en actividades ilegales, ya fuera para conseguir dinero o por hacer justicia por propia mano, y era capaz de cometer los peores asesinatos.

Y sí, Jorge A. Jiménez tuvo la oportunidad de interpretar también este otro lado del personaje y eso fue lo que más le llamó la atención del proyecto.

Armando Hernández como Tomás Urbina y Jorge A. Jiménez como Pancho Villa.
Armando Hernández como Tomás Urbina y Jorge A. Jiménez como Pancho Villa. Foto: Star+

5 datos curiosos sobre la Revolución Mexicana que no te dicen los libros de historia

“Me llamó mucho poder ver el otro lado de la moneda; ver el lado humano, el nombre y ver ese lado oscuro que muchas veces se dice, pero no se cuenta”, explica y añade que como actor ese abanico de posibilidades es “un sueño hecho realidad”.

Desde el inicio, la serie Pancho Villa muestra cómo Doroteo se une al grupo de bandoleros liderados por Ignacio Parra. Desde entonces, se vuelve un hombre buscado por la policía y por eso más tarde, tratando de enderezar su camino, cambia su nombre.

Un hombre que no toleraba el alcohol y admiraba a la gente con educación

Entre las cosas más curiosas que descubrió Jorge A. Jiménez de su personaje, destaca el hecho de que no tomara alcohol. Así es como en la serie lo puedes ver bebiendo café o hasta malteadas, incluso antes de una importante batalla.

Otro dato curioso es que Pancho Villa admiraba mucho a las personas que habían ido a la escuela. Recordemos que él nació en la pobreza en un rancho de Durango y se dice que su interés en la Revolución era mejorar las condiciones del pueblo.

De acuerdo al INEHRM, Francisco Villa asumió el gobierno de Chihuahua durante cuatro semanas. Y de inmediato “declaró ley seca y ordenó bajar el precio de la leche, pan y carne”.

Para Jiménez, la serie Pancho Villa es importante por la figura tan importante que es y porque, independientemente de sus matices, le sigue sorprendiendo que es de esas personas “que fue capaz de generar cambio, de tener ese liderazgo y fuerza de convencimiento”.

¿Y tú le darás oportunidad a esta versión del El Centauro del Norte?

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Imagen BBC
Mackinac, la isla estadounidense donde los autos están prohibidos desde hace más de un siglo y “el caballo es el rey”
7 minutos de lectura

En medio de “la capital mundial del automóvil”, existe una serena isla sin vehículos donde viven 600 personas, 600 caballos y un modo de vida de antaño.

29 de junio, 2025
Por: BBC News Mundo
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Isla Mackinack.
Getty Images
La isla parece haberse detenido en el tiempo.

Michigan, Estados Unidos, es la cuna de la “ciudad del motor” de Detroit, donde nacieron empresas como Ford, General Motors y Chrysler, y que se conoce a menudo como “la capital mundial del automóvil”. Pero frente a la costa septentrional del estado, en el lago Hurón, hay una isla serena y pintoresca que lleva cientos de años atrayendo a los viajeros, y que ha prohibido los coches prácticamente desde que se inventaron.

Bienvenido a Mackinac: una isla de 3,8 km2 donde viven 600 personas todo el año, no hay vehículos motorizados y cuenta con la única carretera estadounidense donde no está permitido conducir. Incluso los carritos de golf están prohibidos en sus calles, así que lo más probable es que si oyes un bocinazo o un chillido, sea de uno de los gansos o búhos de la isla.

Como dice Urvana Tracey Morse, propietaria de una tienda de artesanías en la calle principal, “aquí el caballo es el rey”.

Según la tradición local, cuando en 1898 un coche petardeó y asustó a los caballos cercanos, las autoridades del pueblo prohibieron los motores de combustión interna, y la medida se extendió al resto de la isla dos años después. Desde entonces, los lugareños se han aferrado a este tranquilo modo de vida.

Más de un siglo después, unos 600 caballos hacen que todo funcione, desde el invierno hasta el verano, cuando aproximadamente 1,2 millones de personas se embarcan en un transbordador de 20 minutos desde Mackinaw City o St Ignace, en la Alta Península de Michigan, y llegan al pequeño pueblo (también llamado Isla Mackinac), en el extremo sur de la isla.

Allí, los visitantes compran el famoso caramelo del pueblo, exploran sus 110 km de senderos y se empapan de los sonidos de una época más sencilla.

Mackinac.
Getty Images
Mackinac es una isla idílica en la que los coches están prohibidos prácticamente desde que se inventaron.

“Los caballos se utilizan en todo, desde la retirada de basura hasta las entregas de FedEx”, dice Morse, que ha estado vendiendo arte, joyas y otras mercancías después de visitar la isla por primera vez como estudiante universitario en 1990.

“Así ha sido nuestro estilo de vida; así es nuestro ritmo”, agrega. “A una parte de nosotros le gusta la tradición de desplazarnos en bicicleta, a pie o en taxi a caballo”.

El “lugar de la gran tortuga”

Durante cientos de años, las comunidades indígenas utilizaron la estratégica ubicación de la isla, en la confluencia de los lagos Hurón y Michigan, como lugar de pesca y caza. Pensaban que sus acantilados de piedra caliza y sus bosques verdes se asemejaban a una tortuga gigante surgiendo del agua, así que la llamaron Michilimackinac o “lugar de la gran tortuga” en anishinaabemowin.

Las fuerzas británicas acortaron el nombre y establecieron un fuerte defensivo en la isla en 1780. En la actualidad, los visitantes pueden seguir a los intérpretes disfrazados, ver disparos de cañón y visitar los aposentos de un oficial en el interior del edificio más antiguo de Michigan. Pero más de 200 años después de que EE.UU. tomara el control de Mackinac, tras la Guerra de 1812, sus raíces indígenas permanecen.

“La isla Mackinac es uno de los lugares más importantes y destacados de la historia y la cultura anishnaabe”, afirma Eric Hemenway, un miembro anishnaabe que ha desempeñado un papel decisivo en la recuperación de la historia indígena de la isla.

“El pueblo anishnaabeek ha estado en el estrecho (las vías fluviales que conectan el lago Hurón y el lago Michigan) desde tiempos inmemoriales, dicen algunos. Y seguimos estando en el lugar de nuestros antepasados, aquí en el estrecho. Las aguas eran y siguen siendo las autopistas del Medio Oeste”, explica.

Como señala Hemenway, en la isla se ha encontrado un gran número de enterramientos indígenas, algunos de los cuales se remontan a hace unos 3.000 años. “(Mackinac) es uno de nuestros lugares más sagrados de los Grandes Lagos”, sostiene.

Isla Mackinac
Getty Images
El sitio puede recorrerse fácilmente en bicicleta.

Hemenway también ha trabajado en el desarrollo de Biddle House, que alberga el Museo Nativo Americano de la Isla Mackinac, inaugurado en 2021.

“Mi mayor éxito es cuando veo pasar a otros nativos… esta es nuestra historia”, dice Hemenway.

Oferta variada

A finales del siglo XIX, la isla de Mackinac se había convertido en un lugar de recreo para familias industriales adineradas de Chicago, Detroit y otras partes del otrora próspero Medio Oeste, que acudían a la isla en verano para relajarse en sus aguas prístinas.

El Grand Hotel de Mackinac, de 138 años de antigüedad, tiene habitaciones decoradas individualmente y presume de tener el porche más largo del mundo. También es uno de los últimos hoteles en pleno funcionamiento de la Edad Dorada de la América industrial.

Tal es el singular atractivo del Grand Hotel que la gobernadora de Michigan, Gretchen Whitmer, acudió recientemente a la red social X (ex Twitter) para proponer a la isla como escenario de la cuarta temporada de la serie “The White Lotus”.

Aunque la propuesta fue divertida, Morse no quiere que Mackinac se convierta en un destino turístico multitudinario. “Uno se siente orgulloso del lugar donde vive, pero al mismo tiempo no quiero decirle a la gente lo bonito que es”, dice.

En efecto, esta pequeña isla tiene mucho que ofrecer. El 80% de la superficie de Mackinac está ocupada por el Parque Estatal de la Isla Mackinac, donde los visitantes pueden pasear por bosques centenarios, admirar imponentes pilares de piedra caliza y hacer senderismo, montar en bicicleta o alquilar un coche de caballos para fotografiar una de las atracciones más famosas de la isla: el Arch Rock, de 15 metros de ancho.

Cañón en la Isla Mackinack
Getty Images
Entras las atracciones turísticas que ofrece la isla se encuentran las recreaciones de las actividades que se realizaban en el pasado.

Los lugareños también sugieren dirigirse al norte para recorrer la carretera de cerca de 13 km convertida en sendero para bicicletas y excursionistas que recorre la circunferencia de la isla y ofrece vistas del puente colgante Mackinac, de ocho kilómetros de longitud, y acceso a tranquilas playas cubiertas de guijarros y bosques.

Dejando a un lado los caballos, las 1.500 bicicletas de alquiler de la isla son el principal medio de transporte de residentes y visitantes, un medio de transporte autopropulsado que muestra que los habitantes de Mackinac están encantados de moverse a un ritmo diferente al del resto del país.

Vivir en un lugar sin coches es una de las principales razones por las que Morse, que monta en bicicleta nueve meses al año, ha decidido vivir todo el año en la isla, a pesar de los duros inviernos.

“Me encanta la idea de subirme a la bici y bajar (al pueblo) entre los árboles. Me prepara para el día”, dice. “Siempre estás saludando y hablando con la gente”.

Viaje en el tiempo

Pero aunque el ciclismo es el medio de transporte más fácil y popular, las bicicletas desempeñan claramente un papel secundario en la isla.

“Sin los caballos, este lugar no sería lo que es. Es lo que te hace sentir que has retrocedido en el tiempo cuando te bajas del barco y oyes ese ‘clip clop'”, dice Hunter Hoaglund, quien trabaja en Arnold Freight, una empresa que lleva 140 años prestando servicio de ferry a la isla y que cada mes de abril embarca una manada de sus caballos que pasan el invierno en la Península Superior de Michigan.

“Todos los días aparecen por aquí nuestros camiones (para dejar a los caballos) y en el próximo mes probablemente aparezcan entre 200 y 300 más”, explica.

Se calcula que entre 20 y 30 caballos permanecen en la isla durante el invierno para recoger la basura, entregar paquetes y mantener la isla en funcionamiento.

Rodeada de aguas cristalinas, Mackinac puede quedar aislada periódicamente del continente en invierno, cuando los témpanos de hielo interrumpen los servicios de transbordador hacia o desde la isla.

Arch Rock
Getty Images
Los visitantes pueden ir a pie, en bicicleta o a caballo hasta Arch Rock.

Pero en primavera y verano, Mackinac cobra vida.

Las decenas de lilas que salpican las calles del pueblo empiezan a florecer en junio, en vísperas del popular Festival de la Lila, de 10 días de duración.

Los observadores de estrellas se dirigen al Fuerte Holmes de Mackinac, el punto más alto de la isla, y al bar Cupola del Grand Hotel para contemplar sin filtros el cielo nocturno del norte de Michigan.

Pero para la mayoría de los visitantes, felizmente agotados tras recorrer la isla en bicicleta, lo mejor es disfrutar de un helado o un trozo de caramelo frente al puerto deportivo.

Y todo ello sin el sonido del motor de un coche que estropee la experiencia.

*Este artículo fue publicado en BBC Travel. Haz clic aquí si quieres leer la versión original (en inglés).

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BBC

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